Un reciente estudio del Ministerio de Economía revelaba que Girona fue la demarcación catalana donde más crecieron las exportaciones en el último año. De hecho, en 2022, el volumen de exportación de la industria gerundense se ubicó en récords históricos alcanzando los 7.787 millones de euros.
Esto se debe al gran número de empresas con sede en las comarcas gerundenses que tienen actividad en el extranjero. En Girona existen más de 4.500 empresas que facturaron parte de su producción en el extranjero, cifra que se ha triplicado en los últimos 20 años. Aunque cada vez más compañías gerundenses tienen presencia en el exterior, sólo son 1.262 las que exportan de forma constante.
Una de las particularidades del comercio exterior gerundense es su dependencia del sector alimentario, concretamente de la industria cárnica. Según un informe de ACCIÓ, el valor de esta industria representa alrededor del 20% del total de exportaciones de compañías gerundenses. En esta línea, Rafael Baró es una de las empresas que hace posible esta expansión de la marca Girona en todo el mundo. Tenemos presencia en más de 60 países de distintos continentes. Esto es posible porque desde la compañía tenemos la vocación de adaptar nuestros embutidos a las necesidades de los mercados internacionales y apostamos por la innovación para mejorar nuestra capacidad como empresa exportadora.
