El desayuno no solo es la primera comida del día, sino que es una de las más importantes. Un buen desayuno permite comenzar el día de forma saludable y, a su vez, sirve para aportar la energía necesaria para afrontar-lo.
Es por este motivo que lo más idóneo para desayunar es comer alimentos de gran valor nutricional que cubran las necesidades de proteínas, hidratos de carbono y grasas, así como las vitaminas y los minerales que vamos a necesitar. En este sentido, los loncheados son una buena opción para solventar estas necesidades.
Los fiambres y embutidos contienen una gran cantidad de proteínas y también son ricos en grasas saturadas y sodio. Es por ello que los loncheados son una opción ideal para el desayuno no solo por su aporte proteico y su valor nutricional, sinó también porque son una opción cómoda, puesto que no requieren tiempo de preparación.
Por ejemplo, un desayuno fácil, rico y de alto valor nutricional sería una rebanada de pan, que da un aporte de carbohidratos, unas lonchas de cualquier embutido que son ricas en proteínas y, acompañadas de aguacate y un chorrito de aceite de oliva que nos aportan grasas saludables son una combinación perfecta para un buen desayuno.